27 DE JULIO 2022 – 01:19 Sobrino de Delfín quedó, supeditado a la causa hasta que se determine qué sustancia es. En un allanamiento efectuado en Salvador Mazza había al menos diez paquetes.
La sustancia secuestrada en Salvador Mazza que en ese momento dio positivo para cocaína.
Lo que había arrojado positivo para cocaína en más de 10 kilos, hace una semana el resultado de un segundo test dio negativo. Como consecuencia la Justicia Federal liberó al sospechoso: nada menos que sobrino de Delfín Castedo.
Hace más de un mes, efectivos de la Policía de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires detuvieron a Rafael Castedo, hermano de Delfín, el jefe del clan narco. La detención fue en el marco de distintos delitos como tener la patente del vehículo duplicada y en el interior del mismo un arma de fuego sin estar habilitado. El 29 de junio fue detenido e imputado con prisión preventiva.
En el contexto de esa causa un juzgado de Capital Federal ordenó que se realizaran allanamientos en los domicilios del imputado, uno de ellos en Salvador Mazza, donde gendarmes hallaron diez paquetes con una sustancia blanquecina que sometida al test arrojó positivo para cocaína. Los bultos estaban ocultos en el interior de una parrilla. En medio del procedimiento los uniformados de la fuerza nacional detuvieron al hijo de Rafael Castedo, a quien identificaron como Cristian Alejandro Castedo, de 30 años.
Hasta ese momento nada parecía extraño ni salirse de los supuestos que los sabuesos realizan cada vez que el clan Castedo mueve alguna de sus fichas. Reynaldo Delfín Castedo, detenido en julio de 2016, es considerado uno de los mayores proveedores de cocaína del país, lideró durante décadas una organización narcocriminal transnacional, y junto a su familia tenían miles de hectáreas en la frontera caliente entre Salta y Bolivia.
Tras la prueba orientativa realizada por personal de Gendarmería Nacional Argentina a la sustancia secuestrada en una vivienda de Salvador Mazza, donde fue detenido el sobrino de Delfín Castedo, el juzgado porteño giró las actuaciones al juzgado norteño, a cargo del juez federal Gustavo Montoya. A través del nuevo sistema acusatorio, donde el fiscal federal es quien lleva adelante la investigación y las medidas de coerción, el sospechoso de 30 años fue trasladado a esta provincia y alojado en el Complejo Penitenciario Federal III de General Gemes.
Hace una semana, y en el marco de seguir el curso legal de la investigación, peritos de la Gendarmería volvieron a realizar un test a los supuestos 10 kilos 291 gramos de cocaína hallados en Salvador Mazza, un nuevo análisis que se suele realizar para certificar el primer resultado pero, sobre todo, para determinar el grado de pureza del mismo. Para sorpresa de todos, esta vez dio negativo y se prendió la alarma.
En una audiencia celebrada ayer en la Justicia Federal, solicitada por la Fiscalía para morigerar la situación del sospechoso, el abogado de Cristian Castedo solicitó el sobreseimiento de su defendido, entendiendo que el elemento por el cual su cliente fue privado de la libertad no se encuentra. Se hizo lugar a la liberación del joven Castedo quedando supeditado a la causa, en tanto el pedido de sobreseimiento fue rechazado. Ahora el fiscal federal de Orán, doctor Valencia, deberá esperar el resultado de un tercer test que lo realizará la Policía Federal para seguir el curso de la investigación.
Pregunta del millón
En medio de la incertidumbre por saber qué sustancia se encuentra en esos paquetes, surgió la pregunta: ¿Qué hacían esos diez paquetes en el interior de un parrillero o asador? Estaban ocultos y confeccionados como los típicos “ladrillos narcos”. ¿Para qué tenía esos paquetes? Al ser llevado a la audiencia de imputación el joven Castedo se negó a declarar. La Policía Federal determinará qué tipo de sustancia es, en función de ese resultado seguirán las actuaciones.
Otras Noticias
El nuevo arzobispo de Buenos Aires nombrado por el Papa
Dictaron la falta de mérito en el caso D’Alessio
Jueces supremos autoerigidos como monarcas